“La cerveza tiene un 4% de grado de alcohol trae malta, arroz y miel y está catalogada como artesanal y la idea es venderla en cervecerías que tengan la gama amplia de este tipo de bebidas”, explicó.
La etiqueta de la cerveza tiene el rostro del narcotraficante y el logotipo de la marca, que es propiedad de su hija Alejandrina Guzmán Salazar.
Al igual que la ropa y los accesorios que son comercializados desde mediados del año pasado, la cerveza toma el sobrenombre del capo y el número 701 por el lugar que la revista Forbes le dio en la lista de los hombres más ricos del mundo.
“No sé si le quitamos la etiqueta y la cerveza es buena si se va a vender. Pero obviamente la marca da el plus de venta, nosotros seguimos con la idea de que estamos vendiendo y mientras el producto sea bueno, la gente lo compra y les gusta”, señaló Ituarte.
La cerveza tendrá un costo de 70.10 pesos y se espera que sea distribuida en bares y cantinas de todo el país.
La gerente precisó que por ahora están imposibilitados para comercializar la cerveza ya que la marca aún no cuenta con los permisos por parte del Instituto Mexicano de Propiedad Intelectual (IMPI).
De acuerdo con documentos públicos de ese instituto el permiso de explotación de la marca no ha sido otorgado a Guzmán Salazar debido a que es similar a otras anteriormente registradas como El chapo de Sinaloa, El 701 e Imperio 701.
La figura de Guzmán Loera, quien cumple una condena de cadena perpetua en Estados Unidos por narcotráfico, forma parte del imaginario cultural de los mexicanos y se ha potenciado con series de televisión y la comercialización de diversos productos.
El éxito de la marca El Chapo 701 ha propiciado la apertura de la primera tienda de ropa que será inaugurada en febrero en Guadalajara, adelantó Ituarte.