La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) propuso este miércoles un incremento al salario mínimo con el fin de aumentar el poder adquisitivo de los mexicanos.
“En conjunto, nuestra propuesta es que antes de terminar 2017 el salario mínimo alcance 89.35 pesos”, de acuerdo con la sugerencia de la Coparmex, que surgió tras una consulta que hizo el organismo empresarial entre sus socios.
La cifra propuesta busca que el salario pase de los actuales 73.04 pesos diarios, cifra establecida por la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), a los 89.35 pesos.
La Coparmex pretende que el salario mínimo se recupere hasta alcanzar la línea de bienestar que calcula el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), y que incluye canasta alimentaria más canasta no alimentaria.
El Coneval mide la pobreza a través de dos líneas de ingreso: la de bienestar mínimo, que equivale al valor de la canasta alimentaria por persona al mes, y la bienestar, que equivale al valor total de la canasta alimentaria y de la canasta no alimentaria por persona al mes, de acuerdo con su página de internet.
“La única manera de abatir la pobreza es elevando el salario real de los trabajadores, que permita paulatinamente recuperar su poder adquisitivo”, indicó el organismo a través de un comunicado publicado este miércoles.
La Coparmex estima que llegar a ese nivel ideal del salario debería tomar un plazo no mayor de 12 meses, siempre que la economía lo permita.
Y agregó que este aumento no debe vincularse con el aumento en otros salarios con el propósito de evitar un alza en los precios de los productos y servicios y, por lo tanto, un efecto inflacionario.
“El aumento al salario mínimo debe ser nominal, no porcentual, porque debe quedar reflejado el aumento principalmente en los niveles más bajos de la remuneración actual”, señala.
El grupo Acción Ciudadana Frente a la Pobreza, que agrupa a más de 60 organizaciones civiles en todo el país, indicó que ahora solo falta que el gobierno acepte.
“Los patrones, que son los que pagan los salarios han dicho sí, ahora solo falta que el gobierno acepte que el salario mínimo debe elevarse por razones económicas, sociales y éticas”, dijo Rogelio Gómez Hermosillo, coordinador del grupo.
