Mario Ismael Moreno Gil, diputado del partido Morena, presentó una iniciativa para modificar los nombres de la Comisión de Cultura y Cinematografía y la Comisión de Radio y Televisión; la primera quedaría como Comisión de Arte y Cultura y la segunda como Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía, separando al cine de las demás artes y la cultura y colocándolo junto a los medios de comunicación.
Esta propuesta no ha parecido en lo absoluto una buena idea a Felipe Cazals, reconocido cineasta mexicano responsable de cintas como Su Alteza Serenísima, Canoa y Emiliano Zapata. La razón para su molestia es que el cine es considerado el “séptimo arte” desde hace mucho tiempo y le parece una falta de respeto para los artistas involucrados en la industria que se separe del arte y la cultura.
El diputado selañó durante una conferencia de prensa (vía El Universal):
Así, con el firme propósito de contribuir desde mi trincera, propongo estas dos modificaciones que responden a la necesidad de ajustar las denominaciones de las comisiones y los temas de su competencia, para que den cuenta de la realidad social y cultural, pero también ecónomica y política, insertada en un contexto a la vez global y local.
Según Moreno Gil, la vinculación de “arte” y “cultura” ayudará a que las comunidades artísticas tengan más apoyo y oportunidades. En cuanto al cine, dice que encuentra una “íntima relación junto a las industrias de la radio y televisión” debido a su impacto y el uso de herramientas tecnológicas.
A través de su Facebook, Cazals escribió este texto acompañando la noticia mencionada anteriormente:
El Diputado Federal de Morena, Mario Ismael Moreno Gil, propuso dejar de considerar a la cinematografía mexicana como una expresión artística y remitirla a la Comisión de Radio y Televisión. Doble gafe de Moreno Gil: el cine es el Séptimo Arte desde sus inicios, en el S.XX, y la radio y televisión son medios de transmisión. La comunidad cinematográfica mexicana lamenta la crasa ignorancia de dicho representante y hace votos para que su silencio sea de oro.
Tal vez las problemáticas que el diputado quiere enfrentar con estas reformas a las fracciones VII y XXXIV del numeral 2 del artículo 39 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos no van encaminadas a menospreciar la actividad de los cineastas y todos los involucrados en producciones fílmicas de México, sino a beneficiarlas con las políticas públicas.
La definición de lo que es “Arte” y lo que no es, es un tema en el que numerosos expertos y pensadores no logran coincidir; hasta el siglo XIX y principios del siglo XX parecía algo posible de responder, pero numerosas manifestaciones artísticas fueron apareciendo que desafiaban las concepciones más vanguardistas de su tiempo hasta que se volvió prácticamente imposible ponerse de acuerdo.
Por EL UNIVERSAL
