Familia deportada pasará una amarga Navidad
Raymundo Granados Mata tenía un año y medio viviendo en Estados Unidos, se dedicaba a vender azulejos, cuando de repente en una redada sorpresa, arrestaron y deportaron a México.
El hombre muy afligido expresó que este años pasará una Navidad muy triste junto a su pequeño hijo de 6 años de edad, debido a que la mala situación que viven desde su deportación, tienen que pedir dinero en las calles para poder comer.
Lo más difícil para Raymundo en su travesía de regreso a México fue ver sufrir a su hijo de bronquitis y asma, sin poder ayudarlo.
“Mi niño tiene asma y bronquitis, en Obregón nos brindaron comida en la calle, pero le pusieron vidrio molido, y me tuvieron que hacer lavado de estómago, gracias a Dios mi hijo ya había comido, sino le hubiera tocado a él”.
Raymundo tiene 40 años y es originario de Querétaro, fue deportado de la ciudad de Santa Fe, Nuevo México, junto con su esposa, hijo, suegra y cuñado, estos dos últimos con padecimiento de esquizofrenia.
“Deportaron por Tijuana 16 camiones, y ahí rifaron 42 boletos para regresar, pero a nosotros no nos tocó, llegamos de raite aquí y buscamos regresar a Querétaro”, apuntó.
“Me puede que mi hijo pase la Navidad vagando con nosotros; Donald Trump alteró todo el sistema ahora donde te encuentren te avientan a México”.
Autoridades municipales han brindado apoyo a la familia a la cual instalaron en un hotel de la ciudad, y los ayudarán para que regresen a su lugar de origen.