El fotógrafo Scott Threlkeld estaba parado en una escalera de 5 pies cerca de la esquina de las avenidas de Orleans y North Carrollton para el desfile de Endymion el sábado por la noche cuando la camioneta gris se acercó a la multitud cerca de él.
Después de oír “un enorme y explosivo choque” detrás de él, Threlkeld giró a su derecha y vio el camión acelerando a través de la multitud, como un barco a través del agua.
“Fue como una estela de agua, los cuerpos siendo cortados fuera del camino”, dijo Threlkeld, de 59 años, quien ha sido colaborador regular del Defensor de Nueva Orleans desde finales de 2012.
El veterano fotógrafo de Nueva Orleáns terminó sacando imágenes cruciales de la escena del accidente, a pesar de haber sido golpeado con tanta fuerza que sus lentes salieron volando, lo que le hizo casi imposible comprobar el enfoque de sus cámaras.
Inmediatamente después de que la camioneta fuera de control se estrelló contra un camión de basura estacionado en el suelo neutral, fue una pelea cuerpo a cuerpo, dijo. Muchas personas en la multitud simplemente estaban tratando de huir. Threlkeld bajó por la escalera e intentó evaluar la caótica escena que lo rodeaba.
Tomó varios disparos de todo lo que vio, con la esperanza de que algunas imágenes estarían en foco. Luego, con la llegada del periódico a la hora de la tarde, comenzó a caminar unos 10 cuadras de la casa del fotógrafo Eliot Kamenitz, que esperaba poder ayudarle a mirar sus fotos. Como no podía leer las señales de las calles, Kamenitz lo guiaba por teléfono y los pasajeros útiles le leían carteles y señalaban el camino.
Entonces Threlkeld abrió su computadora portátil y le pidió a Kamenitz que escudriñara las 200 imágenes más de la escena del accidente para ver si alguna de ellas era aguda. “Fue difícil. Eliot no estaba familiarizado con mi computadora, y no podía ver las imágenes “, dijo.
