Tras el reconocimiento “oficial” de Jerusalén como capital de Israel, por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ya hubo reacciones de los diversos líderes del mundo, pues esto, considera la mayoría, supone una escalada de violencia en Medio Oriente. La decisión la tomó después de ordenar el traslado de la embajada estadounidense de Tel Aviv a Israel y reivindicar “un nuevo enfoque” para el conflicto israelí-palestino.
Molestia, rechazo y preocupación generalizada
Antonio Guterres, secretario general de la ONU
Declaró que el estatus de Jerusalén debe ser decidido por una “negociación directa” entre israelíes y palestinos, reiterando que siempre ha estado “en contra de toda medida unilateral”.
Unión Europea
Manifestó su “seria preocupación” por las repercusiones que pueda tener sobre las perspectivas de paz.
Papa Francisco
Expresó su “profunda preocupación” y pidió que “todos respeten el estatus quo de la ciudad”.
Emmanuel Macron, presidente de Francia
Calificó de “lamentable” la decisión de Donald Trump y pidió “evitar a cualquier precio la violencia”.
Resaltó “el compromiso de Francia y Europa con la solución de los dos Estados, Israel y Palestina viviendo como vecinos en paz y seguridad en fronteras reconocidas internacionalmente con Jerusalén como capital de los dos Estados”.
Angela Merkel, canciller de Alemania
Declaró que su gobierno no apoya la acción porque el estatuto de Jerusalén solo puede ser negociado como parte de una solución de dos Estados.
Mevlut Cavusoglu, ministro turco de Relaciones Exteriores
Calificó de irresponsable e ilegal el anuncio de Trump, pues la decisión va contra la ley internacional e importantes resoluciones de Naciones Unidas.
Ismael Raduan, portavoz del movimiento islamista palestino Hamas
Declaró que el mandatario estadounidense “abrió las puertas del infierno” con el reconocimiento e hizo un llamado a los países árabes y musulmanes “a cortar los lazos políticos y económicos con las embajadas estadounidenses y a expulsar a los embajadores” de Washington.
Mohamed Mumeni, portavoz de Jordania
Denunció como “una violación del derecho internacional de la carta de Naciones Unidas” el hecho.
Mahmud Abas, presidente de Palestina
Afirmó el miércoles que Estados Unidos perdió su papel histórico de mediador de la paz entre palestinos e israelíes.
Explicó que “mediante estas decisiones lamentables, EU boicoteó deliberadamente todos los esfuerzos de paz y proclama que abandona el papel de patrocinador del proceso de paz que ejerció en las últimas décadas”.
China
Expresó su inquietud por un “posible agravamiento de las tensiones regionales”
Rusia
Actor crucial en el Medio Oriente, habló de un “posible deterioro”.
Reino Unido
Expresó su desacuerdo con “la decisión estadounidense (…) Creemos que es de poca ayuda en lo que respecta a la perspectiva de paz en la región”.
Irán
Condenó fuertemente la decisión de Trump, pues provocará una “nueva intifada” palestina, así como una escalada de comportamiento radical, iracundo y violento.
El único apoyo
Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel
Dijo que es “una decisión valiente y justa”, que no cambiará el statu quo en torno a los lugares santos de la Ciudad Santa para judíos, cristianos y musulmanes.
Instó asimismo a “todos los países que buscan la paz a unirse a Estados Unidos en el reconocimiento de Jerusalén como capital de Israel y a trasladar sus embajadas hasta aquí”.
