La sobrina de Britney Spears, Maddie, se encuentra en estado crítico pero estable, después del accidente que sufrió el domingo 5 de febrero en un Polaris RZR 170, y del que ahora se saben más detalles.
La pequeña no estaba con su padre, sino que con su madre, Jamie Lynn Spears, y su padrastro.
La hermana de Britney y su pareja vivieron minutos de desesperación cuando el auto se volcó y se sumergió en un estanque.
Maddie estuvo atrapada bajo el agua mientras ellos intentaban quitarle el cinturón de seguridad… sin poder lograrlo. Dos minutos después llegaron las ambulancias que lograron liberar a la niña.
Además de revelarse la historia completa, hay otra cosa muy importante que se dejó saber: la hija de Jamie Lynn Spears no debía estar conduciendo.
El Polaris RZR 170 tiene un manual que especifica: “Nunca permita que un niño menor de 10 años opere o viaje como pasajero en este vehículo”. Maddie tiene solamente 8.
Se conocen otros accidentes graves en estos autos, como una vez que un RZR rodó y partes de metal se clavaron en la cabeza y cuello del conductor, fracturando su espina dorsal. Y en otro caso una persona fue gravemente herida cuando la jaula del Polarois se derrumbó sobre ella.
Desde la compañía no han hablado mucho del tema y se limitan a enviarle su apoyo a la pequeña.
“La seguridad de nuestros conductores es nuestra prioridad absoluta, nuestros pensamientos y oraciones salen a la familia”.
La familia ha optado por lo mismo, y Britney ya pide a sus seguidores que apoyen a su sobrina.
