2. Hoy en día, el 73% de los automóviles que circulan en el país no cuentan con la protección de un seguro. Registros de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) revelan que en un año, las compañías de seguros reportan cerca de 800 mil accidentes de vehículos asegurados.
3. Los daños comunes de los autos son generados por colisiones que afectan la parte estética del auto, posteriormente son los mecánicos en percances de mayor magnitud y finalmente la rotura de cristales.
4. Actualmente, en México existen cinco coberturas básicas para el seguro de vehículos:
– Robo total: ampara los daños que sufra el vehículo por el robo total perpetrado.
– Daños materiales: Ampara los daños que sufra que sufra el vehículo a consecuencia de un choque, vuelco, rotura de cristales, incendio o fenómenos naturales, entre otros.
– Gastos médicos a ocupantes: cubre los gastos por concepto de atención médica al conductor y otros ocupantes del automóvil a consecuencia de un riesgo amparado por la póliza. Generalmente se establece un monto máximo por persona y un límite total por todos los ocupantes.
– Responsabilidad civil (RC): cubre los daños ocasionados por el vehículo a terceras personas en sus bienes y/o en sus personas. Esa cobertura está pensada para proteger a las víctimas de accidentes viales.
– Cobertura amplia: te brinda la protección más completa al cubrirte en caso de daños materiales, robo total, responsabilidad civil y asistencia técnica.
5. La oferta de Seguro de Auto con cobertura amplia de AXA incluye sin excepción una protección contra daños materiales, en caso de solo contar con cobertura de Responsabilidad Civil, el auto no estará amparado por daños ante estos fenómenos.
6. Es importante resaltar que no importa con qué tipo de cobertura se cuente, hay situaciones en las que tendrás que hacerte responsable por los daños. Algunos ejemplos: conducir en estado de ebriedad, robo de llantas, caída de árboles por tala o poda.
7. Las exclusiones al seguro con cobertura amplia son:
1. Ruptura o descompostura mecánica de alguna pieza.
2. Falta de resistencia de cualquier pieza del auto como consecuencia de su uso.
3. Desbielamiento originado por falta de mantenimiento.
4. Agravamiento del riesgo.
5. No tener cubierto el pago de la prima.
8. En caso de accidente y dependiendo del tipo de siniestro, el promedio de reparación es de 15 días hábiles.
Sugerimos:
1. Revisar qué cobertura tenemos contratada. Es muy importante checar si en nuestra póliza está incluida la protección contra daños materiales.
2. Reportar el daño a la compañía de seguros.
3. Solicitar la presencia de un ajustador.
4. Evaluar las pérdidas.
5. Cubrir el deducible.
9. Algunas recomendaciones indispensables para contratar tu seguro:
· Es conveniente recordar que al contratar un seguro deben quedar muy claras las condiciones generales de la póliza, así como conocer la cobertura pactada.
· Verificar que el documento tenga impreso el número de póliza, los datos del contratante, datos del conductor habitual, información del vehículo (modelo, número de motor, placas, etc.) y datos de la aseguradora.
· Leer detenidamente las condiciones y exclusiones definidas en la póliza.