En medio de la caída de los precios internacionales del petróleo y la necesidad de equilibrar la balanza pública y reducir el déficit, el gobierno hará un recorté al gasto público en el que se incluye un ajuste de 31% en la inversión en infraestructura hidráulica.
“De ahí la importancia de aprovechar los mecanismos alternos de financiamiento con que hoy contamos”, dijo Gustavo Arballo, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en la reunión nacional de infraestructura hidráulica, en Nuevo Vallarta, Nayarit.
Entre esos mecanismos se encuentran los esquemas de asociación público-privada, las Fibras, los proyectos que impulsa el Fondo Nacional de Infraestructura (FONADIN) de Banobras y la emisión de deuda en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
De acuerdo con Arballo, solo 5.2% de los proyectos apoyados por el FONADIN son destinados a obras de infraestructura hidráulica por lo que es una gran oportunidad para la iniciativa privada.
Cobertura, la prioridad de la inversión hídrica
Roberto Ramírez, director general de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), afirmó que en la administración actual se han invertido 125,535 mdp en obras de cobertura hídrica.
“Es la primera vez que la mayoría del presupuesto de Conagua está enfocado a llevar agua y drenaje a la población que no la tiene”, aseguró Ramírez.
El funcionario detalló que dentro de las metas para 2018 está el tener una cobertura nacional de 94% en agua potable, de 93% en alcantarillado y de 70% en saneamiento.
El monto de inversiones estimado para obras hidráulicas del Programa Nacional de Infraestructura 2014-2018 es de 417,000 millones de pesos.
